Y comenzó el mundial de fútbol en la
exuberante Brasil, la tierra también del famoso novelista y dramaturgo Paulo
Coelho, uno de los escritores más famosos del mundo. Las apuestas están por
doquier.
El sábado 7,
cuando la H jugó su último partido amistoso con su par de Inglaterra, mi
teléfono comenzó a sonar a los 15 minutos de concluido el juego. Era el
periodista Mario Landa, para preguntarme si había visto el espectáculo
deportivo, inspirado por mis últimas “inquietudes”
futbolísticas.¿Qué le pareció
el partido Lic?, me dijo. Y sin tapujos le respondí: Marito, me dormí, ¡es que
a mí el fútbol me da sueño! Las carcajadas no se hicieron esperar.
¿Pero cómo
jugamos?, le pregunté y su respuesta me causó gracia: como el murciélago. ¿Cómo
así?, volví a preguntar.
Pues sí—me
explica—todos guindados en el marco para que no entre la pelota.
Me he muerto de
la risa y me encanta esa explicación de Mario Landa, tan sencilla, dirigida a
gente como su servidora que si bien no entiendo el fútbol, imagino con esa descripción como estuvo la
vaina. El periodismo es también el uso del recurso de la imaginación.
Los murciélagos
son vertebrados mamíferos que se caracterizan por poseer alas en las manos. Se
dice que en el mundo existen más de mil especies, cada una con sus
características propias y su razón de ser.
Su característica
más sobresaliente es la presencia de membranas o alas que les permite ser los
únicos mamíferos verdaderamente voladores, según lo que encontré rastreando el
Internet.
Las alas de los
murciélagos tienen tres funciones básicas: servir para el vuelo, para la
termorregulación de la temperatura de su cuerpo y para capturar insectos.
Esas, entre
otras, son las funciones y cualidades de los murciélagos. En el caso de la H,
los pronósticos de quienes he consultado es que la selección jugará ante
Francia como el murciélago. Dicen que jugará con un portero y 10 defensas, es
decir, guindados protegiendo el marco.
Sé que Francia es
una selección poderosa por la calidad de sus jugadores, por el índice de
desarrollo humano, por los nutrientes, por la cultura y por todo lo que
encierra ese país que llegó a inspirar nuestro himno nacional con sus gestas
históricas a favor de las libertades y los derechos humanos.
Intuyo entonces
que ese primer partido de la H será de miedo, quisiera que me “pelara el eje”
como dice Polache, pero es Honduras, una marca país a la que todos, sin
distinción alguna, queremos, sufrimos y apostamos porque sea digno de mejor
suerte, más allá del fútbol.
Partiendo de que
la H pondrá en práctica este domingo ante Francia su “Operación Murciélago”,
las predicciones sobre los resultados se dividen: los que esperan el milagro
del empate o la gloria del triunfo, y los que aseveran tendremos una derrota
sin precedentes, como asegura el también colega, Nelson Lanza.
Su tesis la
sostiene por el poderío futbolístico que representa Francia y porque en los
juegos amistosos la H no fue tan contundente, dejó ver sus falencias. Jerry
Carbajal le secunda, dice que le gustó más una lasaña que cocinó que ese último
partido preparatorio.
Pero los
optimistas como Mario Landa y Raquel Lazo, dicen que hay que confiar en la H.
Ellos dicen que el fútbol es de tardes, es decir, de esos momentos en que se
suelta la inspiración. Hay días, sostienen, que sale todo y si los jugadores agarran
la hebra pueden hacer un buen papel en el mundial.
Como la imaginación
periodística no puede faltar, me pregunto: ¿Será que la H en esa operación murciélago
usará sus alas para calcular su vuelo? ¿Será que son capaces de regular su temple
frente a un rival poderoso y un auditorio repleto que buscará sacarlos de su cordura?
¿Será, siguiendo la lógica del murciélago, que en algún momento se desprenderá alguien
del marco para salir a capturar su presa?...Como que ese partido me está generando
dolor y tensión, tensión y dolor, Jajaja. Mejor, espero el resultado y sigo buscando
algo más de los murciélagos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario