miércoles, 21 de mayo de 2014

Amigas por siempre

La vida como que se ha propuesto este año arrancarme valiosos afectos, entre ellos los relacionados con mi infancia. Fue así como asistí a despedir a mi entrañable amiga, Laura Paredes, mi compañera de escuela, secundaria y los primeros años universitarios, cuando ambas tomamos caminos distintos.
“La Nina”, como cariñosamente le llamaba su familia y sus amigos, era un ser especial no solo por su belleza física, sino que también espiritual. De sonrisa dulce y espontánea, Laura siempre fue una mujer inquieta, inteligente y muy valiente. Leal con sus amigos y con su familia.